martes, 12 de mayo de 2009

CRITICA VENENOSA


ALINA SUPLICANTE


Alina suplicante es un cúmulo de novelas venezolanas y mexicanas. Nada nuevo, todo muy cotidiano y familiar. El tópico viene y va entre los affaires, el rompimiento de una relación larga, el interés, un clavo saca a otro clavo, los celos, los verdugos y sus víctimas.

En si la novela maneja un lenguaje fluido tanto verbal como en imágenes, porque describe sitios conocidos y hace que el texto tome vida. La temática es pésima, pero divertida, aunque la salva el manejo sutil del incesto. El lector sabe por miles de puntadas que el escritor ha dado, que ellos dos Julián y Alina están enamorados pero las escenas no lo muestran claramente. Solo se da esa confirmación cuando ella lo besa en la boca (discoteca, ellos están con Barreto y Virginia) y luego cuando Julián viaja a Francia en busca de Alina). Uno se lee la novela no tanto por lo interesante que está, sino por ese deseo incestuoso que todo el mundo tiene y desea verlo cumplido en el texto.

Leerlo me hizo acordar un texto y un escritor. El texto es María (Jorge Isaacs) por la sutileza que maneja este en el romanticismo y los roces entre María y Efraín. En Alina por el manejo que dije anteriormente de la sexualidad y lo incestuoso de la novela, no se ven las escenas explicitas como en un Marques de Sade y los temas podrían sonrojar a un atarantado sensual por abordar temas tan explicito como lo inmoral-sexualidad, incesto y la anulación de la consanguinidad entre parejas, que bien se sabe aun en la biblia estas uniones son bien vistas en Pro de la estirpe.

No puedo decir que el texto es malo, pero tampoco bueno, diría que del montón.

En cuanto a la narración no me quejo, lenguaje simple. Imágenes concretas y sutiles.. Tema conocido aunque no muy desarrollado. Los personajes convincentes, cada cual con sus peculiaridades y culpas. EL espacio se desarrolla entre Bogotá- Francia / Francia- Bogotá, su uso se me antoja calculado y bien planeado.

En el aspecto estructural no hay nada malo. Sólo es el tópico escogido que resabe a idiotez, demasiado obvio para escribir una novela. No niego que me gusto leerla fue divertido, pero no la recomendaría. Es como ver una película por sus cortos (ojear el libro un poco) empezarla a leer. ¡ Te gusta! Tiene sus cosas buenas, pero al terminarla te quedas en el asiento pensando y sacudiéndote las manos de crispetas. Sales del teatro, te encuentras con un amigo y te pregunta por la película ( texto)
- ¿ te viste la película?-
- si
- y que tal?
- Es buena, pero mejor espérate a que la tengan en video y la ves en casa. Lo mismo me paso con la obra.


Pd: No es malo, solo que tiene la suerte de Corin tellado, la lees una vez y no la vuelves a tocar.