domingo, 26 de julio de 2009

LA LLAVE ESPECTACULO DE TERROR


LA LLAVE
ESPECTÁCULO DE TERROR



Me entere de este tipo de teatro cuando por falta de empleo envíe mi hoja de vida a “Teatro Vivo” necesitaban personas que les gustara la actuación, el horario era cómodo y sería una nueva experiencia para mi, además de un dato más que agregar a mi nutrida hoja de vida.

Pasaron los meses y por fin me llamaron. Recuerdo que fui con mi amiga Maggi, ya la he citado en algunos de mis artículos. Mientras la esperaba comencé a llenar el formulario largo y particular que debía clasificar mi carácter con el fin de perfilar un personaje. Todo hasta ese momento se podría catalogar de normal, pero de la nada salte de mi asiento y fui a dar a la puerta de salida… ¿La razón? Un berrido de los mil demonios me hizo helar la sangre y quede a punto de que se me saliera el corazón. Ya cuando la razón paso de mis pies al cerebro pude comprobar que en un recinto cercano los actores ensayaban para la nueva obra, en ese momento no sabía que era la “LLAVE” a la final por imprevistos, se frustró mi inclinación hacia las artes escénicas.

Paso el tiempo y salimos de las clases, cada uno tenía su plan. Los únicos desparchados ese sábado éramos Ivancho (un amigo de la maestría) y yo. Pues bien, pensamos de todo, desde ir a un parque de diversiones, agarrar para Panaka - sabana, pero nada, ningún plan nos convencía del todo. Necesitábamos algo más fuerte y entre esos ires y venires recordé la propaganda que algunas veces había visto por televisión de “Teatro en vivo” y la obra la “Llave: Espectáculo de terror” le comenté y bien, ese sábado a eso de las cinco de la tarde nos hallamos en la Calle 36 # 17-12 en el barrio Teusaquillo (Bogotá- Colombia) esperando por entrar.

Me encontraba ansiosa. Tiendo a ser masoquista, debo decir que me encanta que me asusten aunque luego no pueda pegar el ojo por varios días y este era uno de esos planes.

Llegamos temprano, con nosotros habían otras cinco personas que al igual esperaban por entrar. Luego de algunos minutos una mujer salio de la casa y nos hizo acercarnos a una especie de toldo donde debíamos escoger una especie de brazalete (trapo) para colocarnos en el brazo, como gran cosa tome el rojo e Iván el verde, los colores determinaban el rol que ibas a representar en la casa. Tomado el rol, te entregan una especie de mini-parlamento que determina la acción o acciones que vas a cumplir dentro de la casa es decir es el argumento de tu personaje. Luego de esto te dan claves simples que no debes olvidar. Si estás cagado del susto con solo decir “Producción” te sacan de escena. Si te ven muy violento “Tus pecados te sacaran de acá, por tres veces” y te sacan.

Normalmente la gente va en grupos o en parejas para vencer el miedo o tener a quien colocar de escudo, pero por tener diferentes roles nos separan. Eso me paso, yo era el hermano menor de los trillizos diabólicos e Iván un investigador, por ende pocas escenas compartimos juntos.

A la hora de la función, me mandaron en el primer grupo con personas que mas allá de compartir expectativas no conocía, en la obra eran mis hermanos, uno de ellos el mayor de los trillizos diabólicos.

Debo decir que el escenario muy lúgubre, un amplio sillón tipo siglo XVIII forrado en tela de tono vino tinto, frente un televisor de los años 60’s sobre una mesa redonda.

Ya estábamos adentro. La función había comenzado y yo me encontraba sola con unos extraños. Lo primero que hice fue percatarme de la pared, no quería que nadie me tomara por sorpresa. Evidentemente era dura, de concreto, eso me hizo descansar, si algo o alguien entraba sería del lado de ellos, los otros que venían conmigo. Se prendió el televisor y durante algunos segundos la nieve cubrió la pantalla, a mi mente vino la imagen de la próxima llegada de Samara Morgan “El aro 1 y 2” con más veras me prepare para que algo pasara pero no paso nada. La información de lo que pasaba en la casa nos fue contada. Nuestra madre se hallaba encerrada en la casa, en algún lugar y no podía salir porque fuerzas paranormales influenciadas por dos de los trillizos malditos (mis hermanos) se encargaban de que todo aquel que entrara no volviese a salir. Obvio, la cosa ya había comenzado y yo estaba ahí metida sin nadie que me protegiera y de nuevo a mi vino a mi uno de los argumentos relativamente similares de cine de terror japonés propio del director Takashi Shimizu y Ju-on , ¿Seria yo Sara Michel Guellar luchando contra los fantasmas y visiones demoníacas? De pronto… Se apaga el televisor – Hijueputa- fue el siguiente sonido que oyeron mis oídos, mientras me desplaza de mi lugar al del borde contrario quedando en las piernas de mi compañero de escena. (Debo aclarar y si miento que me lo refuten aquellos que me conocen, detesto decir groserías, ni si quiera digo marica, marica ahora muy de moda en las conversaciones estudiantiles, pero la verdad ni lo pensé) De la nada salio una mujer levantando la voz, era una de los siete hermanos. Luego del susto caminamos por la casa para llegar al comedor, allí para mi satisfacción se encontraba Iván que recién había entrado.

El escenario era aun más escalofriante que el anterior. Un cuarto lleno de puertas y en la mitad una mesa con una cena a medio servir (escenas típicas de las pelis de terror) estando consciente de esto, me acordé que todos los asesinos seriales, monstruos, fantasmas y demás siempre entran por las puertas y ventanas, por ello me pareció lo más lógico, hacer todo lo contrario que estaban haciendo mis compañeros de escena, por ello me acerque a la mesa del comedor. Se me helaron hasta las tripas, se murieron las lombrices que no tengo y descubrí que pese a que todo el mundo dice que tengo una voz angelical en ese momento el alarido más profundo, largo y sonoro salió por mi boca, algo frío como la misma muerte, corrugado, áspero y que nunca me esperé me había agarrado por las piernas instantes después esta cerca de una puerta, un alarido, golpes en las puertas se apagaron las luces, se prendieron, se apagaron, respiración acelerada en mi oreja, se prende la luz y tras de mi … ¡El mismísimo horror!

No se la pierdan es excelente. Boletas de 20 y 30 mil pesos. Teléfono 6053862.
ADRIANA MARTINEZ